Turismo en Visita Europa, un blog de Turismo y Viajes que ilustra destinos y actividades poco comunes.

Cantabria es una estupenda opción para todos aquellos que quieran disfrutar de una tierra acogedora y tranquila. Está situada en la cornisa Cantábrica, en el norte de España y limita con las comunidades de País Vasco, Castilla y León y el Principado de Asturias.

Su capital, Santander, es una ciudad costera con una amplia bahía y un largo recorrido histórico. Actualmente es una ciudad dinámica, con un gran desarrollo económico y turístico. En ella podemos encontrar multitud de ofertas culturales, y tan sólo hay que mencionar el Palacio de Festivales, el cual cuenta con un programa anual de actuaciones de cualquier tipo (ciclos de teatro, danza, ópera, música…) y que culmina en verano con el Festival Internacional de Santander.
En Santander no podemos dejar escapar la oportunidad de visitar la Catedral, el Palacio de la Magdalena, la plaza Porticada o deleitarnos por sus museos, como el Museo de Prehistoria, el Museo de Bellas Artes o el Museo Marítimo del Cantábrico.

Dos de los grandes valores que contiene la tierra de Cantabria son sus Parques Naturales protegidos y sus restos prehistóricos

Aunque Cantabria no cuenta con una gran extensión de superficie, es la segunda comunidad española con mayor proporción de superficie protegida. Son numerosos los parques que integran la Red de Espacios Protegidos de Cantabria, pero son de destacar el Parque Nacional de los Picos de Europa, el Parque Natural de las Dunas de Liencres o el Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel.

Por otro lado, Cantabria es una de las regiones de Europa más rica en yacimientos arqueológicos del Paleolítico Superior. Y son mundialmente famosas las pinturas rupestres que se encuentran en la cueva de Altamira, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
El Museo de Altamira se encuentra situado a 2 km del núcleo urbano de Santillana del Mar, así que aconsejamos completar la excursión visitando esta localidad y disfrutando de su rico valor histórico-artístico, como la Colegiata de Santa Juliana (templo románico).

Por último, no podemos dejar de mencionar algunas poblaciones emblemáticas de la zona como la villa de Comillas o San Vicente de la Barquera.

La villa de Comillas es una de las localidades más interesantes desde el punto de vista arquitectónico, ya que cuenta con algunos de los edificios más importantes del modernismo cántabro, como la Universidad Pontificia, el Palacio de Sobrellano y su Capilla Panteón, o por supuesto El Capricho del arquitecto catalán Antoni Gaudí.
En cambio, San Vicente de la Barquera cuenta con un atractivo patrimonio monumental y un excepcional medio natural, ya que a localidad está situada en pleno Parque Natural de Oyambre.
Siendo zona pesquera es natural que sus tradiciones y fiestas populares estén ligadas al mar, como la fiesta popular la Folía (Fiesta de Interés Turístico Nacional) o El Carmen (fiesta marinera).

Al sur de Italia encontramos una joya para todos aquellos amantes de la historia antigua, Nápoles. Ciudad situada a los pies del Vesubio, es una de las ciudades con más tradición italiana de todo el país. Es la ciudad más poblada del sur de Italia, y la capital de la Campania.

Cada día llegan cruceros que permiten a los viajeros hacer una parada en esta magnifica ciudad, permitiendo a los turistas poder disfrutar de todas las posibilidades que ofrece la ciudad.
En ella podemos vivir in situ las típicas imágenes que tenemos todos de la Italia tradicional: calles repletas de gente, mercados de todo tipo, puestos de comida, motos circulando, pizzeros amasando la masa…

Pero si lo que quieres es tan sólo dejarte llevar por las calles, es recomendable ir por el centro histórico como el barrio de Forcella, el Duomo, la plaza del Gesú y el barrio de Spaccanapoli lleno de tiendas y pequeñas iglesias, y llegar finalmente al Castel Nuovo y el Teatro San Carlo.

Si lo que os apetece es tener unas vistas maravillosas del Golfo de Nápoles es aconsejable coger alguno de los ferrys que dispone la ciudad.

Es muy recomendable también visitar la isla de Capri y la costa Amalfitana con sus increíbles vistas y sus magnificas playas

Otras de las visitas obligadas son la ciudad sepultada de Pompeya y Herculano, o visitar las zonas de Sorrento o Positano.
Pompeya y Herculano fueron ciudades fundadas por los romanos, las cuales en el año 79 d.C. fueron enterradas en lava y ceniza por la violenta erupción del Vesubio. Actualmente las podemos considerar como museos naturales. Los turistas pueden visitar las ruinas y restos arqueológicos que se mantienen prácticamente intactos. Es una experiencia única poder estar paseando por las calles de lo que fueran ciudades del imperio romano. También no hay que dejar de visitar el Museo Arqueológico Nacional, el cual cuenta con una espléndida colección de tesoros de Pompeya y Herculano así como piezas de arte grecorromano. El Museo cuenta con una colección amplia de mosaicos, esculturas y frescos extraídos de las casas de Pompeya.

Como curiosidad podemos mencionar la Nápoles subterránea, la cual es un complejo de catacumbas y galerías que se encuentran bajo la ciudad. Estos túneles han tenido diversos usos a lo largo de la historia, como por ejemplo ser la vía de escape para los cristianos perseguidos en la época romana o ser refugio de los bombardeos en la Segunda Guerra Mundial. Es una excursión muy interesante que nos adentra a la Nápoles más secreta.

Nápoles como buena ciudad mediterránea posee un clima agradable, el invierno suele ser suave y el verano caluroso. Siendo los meses más calurosos del año julio y agosto, en los cuales también se concentran el mayor volumen de turistas.

Noruega es un país que cada vez cuenta con más turistas que quieren descubrir sus encantos. Cuenta con muchos atractivos turísticos, pero su valor de peso es la belleza de su paisaje, su historia y sus tradiciones legendarias. Pero quien quiera ir a Noruega tiene como asignatura obligatoria conocer sus espectaculares fiordos.

Los fiordos en resumidas cuentas son valles excavados por un glaciar que posteriormente han sido invadido por el mar, dejando agua salada. Al ser normalmente estrechos y bordeados de montañas empinadas, configuran un paisaje natural espectacular. Los fiordos noruegos están declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Es recomendable realizar el viaje a los fiordos en la época otoñal, ya que es cuando ofrece su mejor paisaje y se puede disfrutar de estas inmensas formaciones naturales de forma tranquila. Eso si, seria un error imperdonable dejarse la cámara fotográfica, el viajero apasionado de la fotografía encontrara un sinfín de imagenes que querrá llevarse a casa. Por nombrar algunos recomendaremos los fiordos de Geirangerfjord, Nærøyfjord o Lysefjord.

Noruega cuenta con una amplia oferta de Parques Naturales que permiten al visitante pasear por las sendas señalizadas, así como alojarse en albergues o cabañas totalmente equipadas. El gobierno noruego muy sensibilizado con la conservación de los Parques tiene muy bien limitado estas zonas para causar el mínimo impacto por parte de los turistas.
También es una actividad cada vez más demandada realizar un paseo guiado por los glaciales. Es una experiencia asombrosa estar caminando por esas masas enormes de hielo que han perdurado durante miles de años. Pero ante todo hay que garantizar la seguridad, no se trata de una excursión cualquiera, ya que requiere un equipamiento especial e ir con un guía autorizado.

Son de destacar los glaciares de Briksdal y Nigards, los más populares y visitados

Otra maravilla con la que deleitarse en el paisaje noruego es el sol de medianoche. Es un fenómeno natural en el cual el sol no se pone durante los meses de verano, así que podemos ver el sol prácticamente las 24 horas del día. Es una experiencia esplendida para percibir la naturaleza en su esplendor con un aire romántico y mágico.

Y que decir de las auroras boreales… un espectáculo increíble. Es un fenómeno en forma de brillo o luminiscencia que aparece en el cielo nocturno, normalmente solo en zonas polares. Pero en algunas épocas del año también se pueden ver en otras zonas, como es el caso de Noruega.

Quien quiera poder ver esta demostración es aconsejable que vaya entre las fechas del equinoccio de otoño y primavera, del 21 de Septiembre al 21 de Marzo

Los mejores meses para ver la aurora boreal son Octubre, Febrero y Marzo, se registran entre las 6 de la tarde y la 1 de la madrugada. Se pueden ver desde casi cualquier parte de Noruega, pero los valientes que quieran de verdad verlas deberán ir al norte de Noruega para estar por encima del Círculo Polar Ártico.

Torre Eiffel, uno de los más emblemáticos monumentos de París

Muchos somos los que nos plantamos en las fechas cercanas al día de San Valentín (14 de febrero) sin una idea clara de regalo para nuestra pareja. ¿Tú también perteneces a este selecto club de despistad@s y agobiad@s por la escasez de ideas de regalo para el día de los enamorados? Bueno, pues respira, relájate, y piensa. ¿Se te ocurre algún regalo mejor que una escapada romántica a Paris en San Valentín? Seguro que a tu pareja le das la sorpresa de su vida. Pero claro, París tiene fama de caro y seguro que una escapada romántica te sale por un ojo de la cara. Nada más lejos de la realidad. Para empezar, en los aeropuertos de París operan un buen número de compañías low cost, con lo que no tendrás problemas para encontrar un vuelo barato.

Hoteles románticos para San Valentín en París

Una vez en París,  si quieres sorprender a tu enamorada o enamorado en San Valentín deberás tener todos los detalles de vuestra escapada romántica bien ligados, para evitar sorpresas de última hora.  Por ello, conseguir alojamiento barato en París debe ser una de tus prioridades. La Ciudad de la luz dispone de una gran cantidad de opciones, aunque si lo que buscas es una escapada romántica rápida, quizás lo mejor sea buscar específicamente,  ofertas de hoteles románticos para San Valentín en París. Un buen punto para buscar tu hotel, y romántico como pocos,  es la Torre Eiffel, donde puedes subir para obtener unas vistas espectaculares de París. La sensación de tener París a tus pies derrite a cualquiera, y las immediaciones de la mítica torre incluyen algunos de los rincones más románticos del mundo. Después de vuestro paseo ¿qué tal una buena cena? La oferta gastronómica de París es impresionante, así que te recomendamos consultar una buena guía de los restaurantes de París, en la que seleccionar un lugar acorde a tus gustos y, claro, a tu presupuesto. ¿A que sorprender a tu pareja con un San Valentín en París es más fácil de lo que te pensabas?